En una reciente reunión del departamento de recursos hídricos, se abordaron preocupaciones críticas sobre el hundimiento de la tierra y la gestión del agua subterránea en California. Los funcionarios destacaron que la extracción excesiva de agua subterránea, especialmente de sedimentos de grano fino, ha llevado a un hundimiento significativo del terreno, lo que puede tener consecuencias graves para la infraestructura hídrica y la disponibilidad de agua.
El hundimiento de la tierra, que se ha documentado en varias áreas, afecta la capacidad de los canales y diques, aumentando el riesgo de desbordamientos e inundaciones. Un mapa presentado durante la reunión mostró datos satelitales que indican que algunas regiones han experimentado hundimientos de hasta dos pies y medio, con el canal de Clean Cares y el acueducto de California entre las áreas más afectadas.
Además, se discutió el impacto de la disminución de los niveles de agua subterránea en la calidad del agua. A medida que los niveles de agua bajan, se ha observado un aumento en las concentraciones de nitrato en pozos de agua potable, lo que representa un riesgo para los usuarios de sistemas de agua domésticos y estatales. Este fenómeno se produce a pesar de los esfuerzos para reducir las aplicaciones de nitrato en la agricultura.
La reunión también abordó la necesidad de una gestión sostenible del agua subterránea, en línea con la Ley de Gestión Sostenible de Aguas Subterráneas (SGMA), que exige que las cuencas en California manejen sus recursos hídricos de manera que se garantice su disponibilidad futura. Con muchas cuencas sobreexplotadas, los funcionarios enfatizaron la importancia de implementar estrategias efectivas para asegurar la sostenibilidad del agua en el estado.